UN PERRO QUE LADRA MUCHO,

SE LANZA, TIRA COMO UN BUEY O MUERDE,

A MENUDO LO HACE PORQUE TIENE MIEDO

 

Igual te han dicho otra cosa, como que es muy dominante, o que lo tienes mal educado, o muy consentido.

Pues no es así, y por eso lo que viene ahora te interesa.

Y es que todo el mundo sabe ver el miedo en un perro que huye, mete el rabo entre las patas y tiembla como un flan.

Pero muy pocos lo ven en el perro que reacciona ante todo, o que ataca.

Tampoco en ese perro “que es que es muy nervioso” y, además, destruye todo lo que toca.

Y es que el miedo tiene muchas caras.

Y la mayoría solo conoce una.

Igual te gustaría conocer las demás.

O confirmar que tu perro, en realidad, no está mal educado o es agresivo o dominante o demasiado mimado.

Y es que da igual si tienes un chihuahua macarra, un galgo al que le falta mundo para huir, un dogo que se quiere comer a todo perro viviente o un mestizo que convierte cada paseo en un tour por el infierno.

Todo eso da igual, convives con un perro arrastrado por sus miedos.

Y ese miedo es el que os domina a todos, y no tu amigo peludo.

Mira, la verdad es que miedos tenemos todos.

 

Emoji Tú.

Emoji Tu vecino.

Emoji Tu cuñado (aunque diga que no)

Emoji Yo.

Emoji Los super héroes de Marvel.

Emoji El tipo ese que arrastra camiones con los dientes.

Emoji Y tu perro.

 

Y cada uno lo expresa a su manera.

Pero claro, hay maneras y maneras.

El matiz no está en no tener miedo: está en saber gestionarlo.

Y cuando vives con un perro que sabe gestionar sus miedos, pasan cosas como éstas:

 

Emoji Apetece pasear

Emoji Hay complicidad porque sois un equipo

Emoji Se respira calma en casa

Emoji Da gustito que otros te pregunten cómo lo has hecho (y sepas que no puedes resumir la respuesta en un “demostrando quién manda”)

Emoji Te preocupas menos por lo que podría pasar, y más por pasarlo bien con tu amigo

Emoji Entiendes lo que ocurre y cómo se siente tu perro en cada momento

Emoji Te da igual lo que piensen los demás de ti o de tu perro

Emoji Te sientes más segura de lo que tienes que hacer en cada situación

Emoji Disfrutas de más paz interior al poder anticipar lo que pasa y lo que hacer

Emoji Apetece mucho pasear

Emoji Te sientes a gusto contigo misma y notas que todo fluye con tu perro.

Emoji Notas como te invade el orgullo cuando tu perro se supera cada día

 

Convivir y pasear con un perro capaz de gestionar sus miedos supone tantas ventajas y una mejora tan grande en su calidad de vida (y en la tuya, y en la de quienes te rodean), que hay que vivirlo para tener plena consciencia de ello.

Porque igual has leído, o te han contado, que con un collar mágico, con un mando a distancia mágico, o con un arnés mágico, todos esos problemas desaparecerán.

Como mágicamente.

(¡¡¡Buuhhh, fueeeera, esos chismes solo meten más miedo!!!)

Bien, la magia para niños pequeños y las películas de Harry Potter.

Para los mayores, mejor otra cosa.

Ah, espera, que esa otra cosa es darle premios por todo, enseñarle órdenes “en positivo rosa purpurina”, y obligarle a cumplirlas durante los próximos 10 años.

Porque sobre el papel sonaba bien

Le mandas “sentado”, y le premias, y así no podrá atacar a otros perros, perseguir bicicletas o gruñir a los niños del parque”.

Pero cuando lo has puesto en práctica, terminas desquiciada y gritando, y tu perro ni obedece, ni se come nada de lo que le ofreces.

Algo falla, y no sabes el qué.

Pues volviendo con los mayores.

Si piensas en una situación que te aterre

(Como volar en un avión en llamas, o que tu perro intente comerse a un chihuahua gritón, o que tu maltés sea devorado por ese pastor alemán al que le está mordiendo las uñas)

¿Qué crees que te ayudaría a ti a sentirte mejor?

 

Emoji  Que te disparen con una pistola de agua

Emoji  Que te suelten una colleja

Emoji  Que te den una descarga eléctrica

Emoji  Que te grite y te zarandeen

Emoji  Que te hagan una llave de lucha libre y termines por el suelo con un maromo de 120 kilos aprisionándote contra el piso

Emoji  Sentarte en el suelo a comerte unas palomitas (que casualmente alguien tenía por ahí)

 

Tú no sé, pero yo no encuentro nada sexys ninguna de las seis propuestas.

Y se me ocurren otras tantas en la misma línea.

Ninguna útil, y ninguna agradable para nadie.

Si nada de esto te haría sentir bien a ti cuando lo estás pasando fatal y el miedo te aplasta los pulmones, ¿por qué iba a ser distinto para tu perro?

Ahora bien, ¿y si tu perro te dijese qué necesita hacer para no comportarse como un pandillero?

¿Y si tuvieras ideas prácticas para reducir tensiones en los paseos?

¿Y herramientas para que estuviese más tranquilo en casa, y disfrutases de su compañía de un modo sosegado y amistoso?

¿Y si supieras entenderle y comunicarte efectivamente con él, y él contigo?

¿Y si, por una vez, el centro de todas las (malas) atenciones en el parque fuera otro, y los comentarios pasaran de “ahí viene el perro chiflado neurótico ese” a “vaya, qué cambio, cómo lo has hecho”?

Lo mismo tu vida, y la suya, serían mucho más satisfactorias, ¿sí?

Pues para eso es este curso.

Estos perros se sienten igual. Igual de mal.

Pero lo expresan de distinto modo.

Te voy a contar un no-secreto: convivo con perros que tienen miedo, pero lo disimulan bastante bien.

¿Porque he entrenado “sentado-quieto-no respires” mientras les cebo como a ocas?

¿Porque cada vez que intentan saltar contra todo y contra todos, les controlo hábilmente con la herramienta de moda de turno que-bien-usada-no-hace-daño?

Pues no, para nada, es que ni de lejos.

Porque sé que sus conductas “socialmente inaceptables” se deben a cómo se sienten, no a cómo les he educado, ni a cuántos mimos les di esta semana.

Y porque entiendo cómo se sienten, y entiendo cómo puedo ayudarles a sentirse mejor.

Cuando un perro se siente bien, es más difícil que huya, que tire como loco de la correa, que agreda, que ladre a las farolas o que persiga corredores.

Cuando un perro se siente genial, es que directamente ni se molesta en hacer nada de eso, y prefiere oler el aire y sentarse a mirar las nubes.

 

Sin órdenes.

Sin correcciones.

Sin premios.

Sin juguetes, distracciones ni alabanzas para niño tonto.

Él se ocupa de gestionarlo, y de pedirte lo que necesita.

Y tú, de acompañarlo.

Ese es todo el misterio.

Si una vocecita te dice que esto tiene sentido, y quieres saber cómo hago yo para ayudar y acompañar a mis perros.

(Y a los de mis clientes)

Este curso te va a gustar.

Si estás pensando que soy una idiota que vive subida en una nube en un universo paralelo donde todos los perritos llevan lazos rosas y se portan yupi solo con que esté ahí.

Y que además niego la realidad porque mis perros son desastres ambulantes debido a que no tengo ni idea de lo que hablo, entonces mejor cierra esta página y vete a algún grupo de Facebook de “fanes” del señor Millán.

Le sacarás más partido, sin duda.

Este curso sirve para enseñarte a gestionar el miedo de tu perro.

Con unos cuantos vídeos donde te detallo qué es esto del miedo en realidad, qué conductas son indicadoras de miedo, y cómo puedes trabajar con tu perro, desde cero, cualquier miedo que tenga.

¿Para quitárselo?

No.

Para que lo gestione mejor y deje de condicionar vuestros paseos.

Vuestra relación.

Vuestras vidas.

Ah, se incluye un pase para una sesión exclusiva, en directo, de preguntas y respuestas sobre las dudas que tengas tras hacer este curso.

Todo lo que cuento en este curso me sirve a mí en mi trabajo diario, lo aplico en mis propios perros, y ha ayudado a los perros de muchas familias (y a sus cuidadores) a rehacer su relación.

Eso sí, este curso solo estará a la venta el mes de marzo.

Luego lo retiro.

Se agota el tiempo

Día(s)

:

Hora(s)

:

Minuto(s)

:

Segundo(s)

¿Para siempre, hasta la semana que viene, o cómo?

Pues no lo sé.

Desde luego este año ya no lo venderé más, y el año que viene, si lo vendo, será bastante más caro.

Cuando lo compres, podrás aprender cosas como:

 

  • Hay miedos que tienen razón de ser, y otros que no. Te cuento cómo diferenciarlos y qué hacer en cada caso.

 

  • Te fliparía saber que una sencilla intervención a nivel digestivo puede hacer que tu perro deje de agredir o de tener problemas para quedarse solo. Se explica en la lección uno.

 

  • Igual lo de tu perro no es que no sepas enseñarle o que esté mal socializado. Los genes importan, hasta límites que ni imaginas, tienes detalles en la primera lección.

 

  • El miedo tiene muchas caras. Por lo menos ocho. Y pocas personas reconocen más de dos. Resulta que saber esto te lleva a replanteártelo todo en lo que a “modificación de conductas” se refiere. Y a mirar a los perros con otros ojos. Se explica en la lección dos.

 

  • Si estás harta de escuchar que el miedo de tu perro se lo has enseñado tú, y que puedes corregirlo con salchichas y buen rollo, en la lección uno te cuento cuatro poderosas razones por las que esto es una burrada muy gorda. Y en la tercera, distintos mecanismos que terminan derivando en miedo, y que no están relacionados con el aprendizaje.

  • Es importante saber qué tenía que haber pasado los primeros meses de vida de tu perro y no pasó, o pasó en exceso. Y de paso, cómo se manifiesta ese defecto o exceso en sus conductas actuales. Cuando veas esta lección, vas a entender mucho mejor a tu perro y a comprender cómo puedes ayudarle de un modo efectivo, amable y respetuoso. Sin premiar ni entrenar ni corregir nada.

  • Hay perros que se comunican (a gritos o mordiscos) y otros que, en realidad, luchan por su vida, ¿cómo lo está haciendo el tuyo realmente? Esto lo tienes en la lección cinco.

 

  • Hay muchos tipos de miedos, conocerlos y aplicar esto en tu perro es mucho más práctico que centrarse en “ladra y se tira a por otros perros, cómo lo corrijo”.

  • Todo el mundo propone que expongas a tu perro para que se acostumbre, o que le socialices más, si va por la calle como un toro enfurecido. Te cuento por qué este es un error fatal, y cómo enfocarlo de un modo que realmente funciona (y es mucho menos traumático para todos).

 

  • Cuando se trabaja con un perro con miedos intensos, lo primero que viene a la cabeza es que necesita mucho amor. En realidad, los perros, todos, necesitan dos cosas para poder mejorar, y el amor, tal y como suele entenderse, no es una de ellas. Puede incluso ser una razón para que tu perro no confíe en ti. Lo tienes todo en la lección siete.

 

  • La causa número uno por la que muchos perros se ponen como locos en la calle, y tratan de huir o atacar a todo lo que tienen delante en los paseos, la tienes en casa. Mientras no resuelvas ese punto, cualquier trabajo fuera será frustrante e inútil.

 

  • Confundir un perro-palito de merluza con uno tranquilo y equilibrado es el peor error que se puede hacer si te preocupa su bienestar. Tienes explicado el motivo en la segunda lección.

 

  • Igual te han hablado del vínculo, que es muy importante y la fuente de todo trabajo con perros. Conforme. Pero ¿cómo hacerlo, si tu perro no admite comida ni juguetes cuando entra en barrena en los paseos? Te lo explico en la lección nueve.

 

  • Cuando tienes un perro combativo, el corregir o castigar “para que sepa lo que está mal” es tan tentador… Pero seguro que nadie te ha contado para qué se hace en realidad, las nefastas consecuencias a largo plazo (para él y para ti), y qué opciones tienes para no vivir en la anarquía canina. Pues hay un vídeo dedicado solo a este asunto.

 

  • En la lección seis se describe el mayor error que comete casi todo el mundo (muchos profesionales incluidos) al enfocar el manejo del miedo para corregirlo. En cuanto lo veas te darás cuenta de que tiene todo el sentido del mundo hacerlo como se explica aquí, y no como se suele hacer.

 

  • El paseo es, a menudo, un gran obstáculo para los perros con miedos. Romper con falsos mitos sobre este tema y enfocarlo como se cuenta en la lección nueve os va a permitir unos avances que ahora mismo no puedes ni imaginar.

 

  • Lo mismo ese perro “demasiado cariñoso” en realidad trata de decirte que la vida le supera, y está pidiendo ayuda. Pero nadie le entiende. Tienes detallado lo que está pasando en realidad en la lección dos.

 

  • Y si convives con un galgo, lección extra para comprenderlo mejor y poder ayudarle. Si no tienes galgos, pero te gustan de verdad los perros, esta lección también te interesa, verás a estos perros con otros ojos.

 

Debes saber algo importante. Muy importante.

Cuando yo empecé a trabajar con perros, tenía muchos estudios y sapiencias sobre conductas y modificación de conductas y cómo eliminar conductas y cambiar conductas.

Conductas, conductas, conductas.

Como si habláramos de los circuitos integrados de una televisión, en lugar de un ser vivo con un sistema nervioso, emociones y motivaciones.

Pero es lo que me enseñaron, y pensé que tenía sentido, funcionaba y era lo que había que hacer.

Luego resultó que no tenía tanto sentido, que a menudo no funcionaba, y la verdad, hay cosas mejores que hacer que meterle mano a las conductas.

¿Te cuento esto para transmitirte el poso de decepción que tenía por tanto esfuerzo, dinero y tiempo perdidos?

Nop.

Te lo digo para que te des cuenta de que, si andas buscando un atajo para que las tensiones y malos rollos en los paseos desaparezcan, acabas de encontrarlo.

Ojo, no vendo trucos de magia ni pases de manos.

Es un atajo porque te ahorrará años y años de cabezazos contra el muro del conductismo.

Los años que me pasé yo, te los ahorras.

Y vas derecha al mundo emocional del perro, al tuyo, y al de quienes te rodean.

Y de pronto, cuando ves la situación con la perspectiva correcta, todo encaja, todo tiene mucho sentido, y puedes avanzar en semanas lo que a mí me ha llevado media vida.

Parece un buen negocio, ¿sí?

 

CURSO DE GESTIÓN DE MIEDO EN PERROS

395 €

ACCESO INMEDIATO

#  PREGUNTAS HABITUALES  #

 

¿Cómo es el curso?

El curso está estructurado en trece vídeos, que suman siete horas y treinta y tres minutos de temario (por si te flipan los números)

Accedes con una contraseña que recibirás al comprarlo.

Eso sí, está diseñado para verse en Pc. Es posible que si tratas de verlo con un teléfono algo falle, porque habitualmente los vídeos soportados en navegador no se escuchan (a mí me pasa, al menos).

Lo digo para anticipar posibles “fallos técnicos” que no está en mi mano resolver (porque es problema de dispositivo, no del curso)

 

¿Hay garantía de devolución?

No. Prefiero que pienses bien en el asunto, si crees que no tengo nada que enseñarte o que aportar para que ayudes a tu perro, es mejor que no compres.

 

¿Es un curso de educación canina?

No. Ni de educación, ni de adiestramiento, ni para entrenar a tu perro a que deje de hacer.

Esto va de emociones, de gestionarlas y de entenderlas. Las emociones no se educan, y hay que vivir con ellas. Pero mejor si esa convivencia es amigable que si estamos peleando con el miedo día sí, y día también, ¿a que sí?

No hay en todo el curso ni un solo ejercicio para tu perro (para ti sí), ni te explico en ninguna parte que con premios, órdenes o control puedes manejar el miedo de tu perro o cambiar sus comportamientos.

 

¿Obtendré un diploma al hacerlo?

No. No es un curso homologado, ni oficial. De hecho, en España los cursos homologados son solo de adiestramiento, y el miedo no se adiestra ni se educa.

 

¿Cuándo es la sesión de dudas? ¿Cuánto dura? ¿Y si no puedo asistir?

La sesión en directo es el domingo 28 de abril las 18:00 (hora Madrid). Dura como mínimo una hora, y quedará grabada.

Te enviaré correo de recordatorio el día antes y el mismo día de la sesión, con un enlace de acceso.

Y otro correo con un enlace a la grabación, por si no pudiste ir o te marchaste antes de terminar.

Si crees que no podrás estar, pero tienes dudas que resolver, manda tus preguntas a guau@comunicacionyrespeto.com, y las contestaré en el directo. Luego ves la grabación, y todos contentos.

Ah, no hay fecha límite para ver esa grabación, forma parte del material del curso. Y también tendrás acceso a la sesión de dudas de ediciones  anteriores.

 

¿Cuánto tiempo tengo para hacer el curso?

Mira, los perros necesitan tiempo para resolver muchos conflictos.

Y las personas, también.

Así que nada de prisas, y nada de agobios, que ya tendrás bastante con tu día a día.

Accedes al momento de la compra y lo ves cuando quieras.

Al ritmo que quieras, y en el orden que quieras.

(Aunque te recomiendo seguir el orden de las lecciones, pero es tu curso, hazlo como prefieras)

Puedes hacerlo en un día, o puedes tardar un año, tienes carta blanca.

Aunque preguntar las dudas en la sesión si ni lo has visto te va a resultar complicado, 😊

El acceso será para siempre, incluyendo la sesión de preguntas, y cualquier actualización futura.

 

¿Este curso servirá para mi perro?

Rotundamente, sí.

Para lo que igual no sirve es para ciertas expectativas humanas.

Que a veces son muy altas, y tratan de cambiar la realidad para que encaje.

Es más sencillo adaptar las expectativas que adaptar a tu perro a lo que los demás esperan de él.

Si te encaja un cambio de enfoque y te preocupa que tu perro viva feliz, y no aplastado por el miedo, entonces es tu curso.

Si una voz en tu cabeza repite hasta el infinito “tengo que corregir estas conductas” para que el perro encaje, sin cambiar nada en ti y en tus rutinas y creencias, entonces para nada, no te va a servir ni como hilo musical mientras cocinas.

 

¿Cuánto tiempo tardaré en ver resultados?

Ni idea. En serio.

No sé si lo aplicarás o no. No sé cómo está tu perro ahora, ni cómo te encuentras tú. No sé cuál es vuestro contexto ni los antecedentes de tu perro, o cuánto tiempo lleva arrastrando el problema.

Pero lo más importante, este curso aplica la filosofía de la educación amable y empática, en la que no se fijan plazos ni metas. Sirve para darte un sistema que puedas aplicar en la convivencia con tu perro, todos los días, y cada día avances un poquito hacia una mejor calidad de vida y una mejor gestión de los miedos.

Los cambios de conducta no son la finalidad de ese sistema, son la consecuencia, y aparecerán cuando tu perro esté listo.

 

Entonces, ¿merece la pena?

Soy parte interesada, así que mi respuesta es sí.

A menos que prefieras pasarte los próximos años “probando de todo y que nada funcione” mientras soportas el juicio de los demás y las opiniones idiotas basadas en consejos simplistas, y que te den ataques de ansiedad en cada paseo.

En ese caso, mejor no comprarlo.

 

CURSO DE GESTIÓN DE MIEDOS EN PERROS

395 €

ACCESO INMEDIATO

error: Este contenido está protegido